Buffalo Wings reduce su consumo energético sin perder sabor ni calidad

Buffalo Wings, una de las cadenas de alitas más grandes de Colombia, ha logrado reducir su consumo energético sin afectar la operación ni la experiencia de sus clientes. ¿Cómo lo hizo? Combinando tecnología avanzada, buenas prácticas y el compromiso de su equipo.

Uno de los pilares de esta transformación ha sido la plataforma Bia Energy, que permite monitorear en tiempo real el consumo de energía en cada uno de sus restaurantes. Gracias a esta tecnología, la empresa puede identificar patrones de uso, detectar desperdicios y tomar decisiones estratégicas para optimizar la operación.

Por ejemplo, el sistema ayuda a saber cuándo y dónde se está consumiendo más energía de lo necesario, lo que permite corregir hábitos y hacer ajustes en la infraestructura para evitar desperdicios.

Pero Buffalo Wings no solo ha confiado en la tecnología, sino que ha implementado una serie de medidas prácticas que han hecho la diferencia:

Mantenimiento preventivo de equipos:

Los hornos, freidoras y refrigeradores reciben chequeos constantes para asegurar que operen con la máxima eficiencia y no consuman más energía de la necesaria.

Gestión eficiente de cuartos fríos:

Se han establecido protocolos para que las puertas de los refrigeradores no se dejen abiertas más tiempo del necesario y para organizar mejor los alimentos, reduciendo la pérdida de frío.

Capacitación del personal:

El equipo de trabajo ha sido entrenado en prácticas responsables como apagar luces y equipos en desuso, programar los electrodomésticos para que funcionen solo cuando es necesario y evitar el desperdicio de recursos.

Optimización de infraestructura:

La cadena ha modernizado su sistema de iluminación con bombillos LED y ha optimizado el uso del aire acondicionado para evitar consumos innecesarios.

Gracias a esta estrategia, Buffalo Wings ha logrado reducir significativamente su consumo energético y, con ello, sus costos operativos. Pero más allá del ahorro, este modelo también le ha permitido prepararse para posibles aumentos en las tarifas eléctricas y contribuir activamente con el cuidado del medio ambiente.

El caso de Buffalo Wings es un gran ejemplo de cómo la eficiencia energética puede ser un aliado en el mundo gastronómico. No se trata solo de ahorrar dinero, sino de operar de manera más sostenible y responsable. Con soluciones innovadoras y buenas prácticas, es posible reducir el impacto ambiental sin comprometer la calidad del servicio.

Sin duda, una inspiración para otras marcas que buscan innovar y hacer la diferencia. ¡Porque la sostenibilidad también se cocina!

Fuente: Revista La Barra